lunes, 30 de septiembre de 2013

Ensayo final de bloque 1


Descripción: https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEin0TFxAXfvxJnqatAHSBnNRXMY7PmJxtxeVHp1hvdPSlvAC159Pt3KGdKdTrADOMyk96Zg48Y4YnLsNwOaT7GbObTvZ2HwF1U5T0fMTJ2YQ6eyRnV-kKWfhCmmjH5lZqGI-3OkKYxkgFs/s320/logoLIE.png












Universidad Pedagógica Nacional No. 144

Licenciatura en Intervención Educativa

Nombre de la Materia:

                               Asesoría y Trabajo con Grupos, Unidad No. 1

Nombre del Profesor:

Psic. Yurian Isaías Ramos Enríquez

Nombre del Trabajo:

"Ensayo De Final De Bloque"

Nombre del Alumno:

José Luis Nazarin Palomar

Grado y Grupo:

5° "A" T/M

Cd. Guzmán, Mpio De Zapotlán el Grande Jal. 30 De Septiembre De 2013




Introducción

El siguiente ensayo tratara temas relacionados al trabajo con grupos, como lo es la importancia del rol del interventor, no solo como un asesor o guía de un conjunto de personas, sino como mediador de conflictos, potenciador de las habilidades individuales y colectivas, como también así, su papel como agente de cambio en la realidad grupal. Teniendo en cuenta que el trabajar en equipo requiere de ciertas características esenciales para lograr a cabo los objetivos que se requieren, se tendrá necesariamente que hacer énfasis en las ventajas de la labor colaborativa y los elementos que conforman dicha técnica grupal.
En este sentido, primeramente se entiende que el proceso de un grupo inicia cuando dos o más individuos se unen con una meta en común, ya sea esta de carácter informal o formal, y para llegar a ese punto, será necesario mantener ciertos lineamientos que faciliten a los sujetos el alcance de dichos propósitos, con esto nos referimos a los cinco elementos básicos para la subsistencia de un conjunto. En primer lugar debe de existir una interdepencia positiva en cada uno de los miembros de un grupo, es decir, habrá que vincular el éxito personal al éxito grupal. Por consecuente se requiere de una interacción promotora, esto significa  que los individuos necesitan apoyarse mutuamente. En tercer lugar se encuentra la responsabilidad individual y colectiva, la cual compromete a todos a enfocarse en la realización de sus tareas. Continuando a lo anterior ubicamos al desarrollo de las competencias de trabajo en equipo, de esta forma se le exige a todos los miembros que adquieran las habilidades interpersonales necesarias para actuar en grupos. Y por último, se localiza la valoración, esta establece que se habrá de evaluar los procesos y productividad de un grupo.
Si se mantiene al margen los postulados anteriores, se lograra llevar a cabo un buen trabajo colaborativo que arroje grandes resultados en cuanto a productividad, eficiencia y calidad, tanto en los objetivos establecidos, como en la capacidad de cada uno de los miembros que colaboro para llevar a cabo estos. Y por supuesto, se conseguirán aprendizajes de mayor valor significativo en todos los sentidos del ser humano.

Desarrollo

En este punto, ya después de haber clarificado el concepto de grupo y trabajo colaborativo, se pretenderá argumentar a favor del interventor en los procesos grupales. De este modo, el papel que juega este elemento, será de vital importancia o no, dependiendo del tipo de grupo y contexto con el que se vea expuesto a trabajar, ya que así como existen conjuntos de personas que no necesitaran de una labor ardua de asesoría por parte del interventor, habrán otros que la requieran en demasía, es decir, que ningún grupo puede marcar seriamente la relevancia de este para mejorar sus procesos y alcance de metas, ya que son los diversos aspectos que rodean el trabajo grupal quienes determinan, cual importante es contar con un asesor.
Esto no quiere decir que sean los grupos quienes hagan todo el trabajo por si solos, ya que necesitan de diversos factores para lleven a cabo sus objetivos, esto significa que el interventor deberá ser muy capaz de detectar las situaciones que requieran de su acción, lo cual lo lograra mediante la aplicación de diversas técnicas de investigación así como herramientas que le generen resultados confiables. Es decir, aunque a simple vista no exista un problema evidente dentro de un grupo, se debe estar atento a cualquier situación que lo pueda provocar, para evitar pérdidas de tiempo y recursos en el conjunto que se asesora.
En resumen, es totalmente correcto decir que para un grupo alcance de forma óptima sus metas, se requiere que este trabaje de forma conjunta, y de no ser así, la principal tarea del asesor, será de la difundir la ideología del trabajo colaborativo, ya que al trabajar a la par, hace menos pesada y laboriosa cualquier tarea que se pretenda llevar a cabo, además de que se mejoraran los procesos a futuro y se maximizara la utilización de recursos y el uso de tiempos, lo que como consecuencia reflejara productos mejor realizados con el menor esfuerzo y de mayor calidad. Si bien es cierto que lograr unir a conjunto de personas es una acción con cierto nivel de dificultad, a la vez es una actividad que enriquece los conocimientos, actitudes y aptitudes que todos tenemos como ser humano, además de que suma valores a la interacción social.
Por eso la clara necesidad de que todos los integrantes ubiquen el concepto de trabajo en equipo para que puedan llevarlo a la práctica real. Ya hablando ciertamente del perfil que requiere un interventor para adentrarse en el trabajo con grupos, podemos argumentar que tendrá que mantener un alto grado de responsabilidad individual y colectiva, ya que el será quien ponga el primer ejemplo de lo que se desea lograr, además de contar con los valores éticos esenciales para desarrollarse como tal, por ejemplo nos referimos a la honestidad, la tolerancia, la igualdad la perseverancia, etc. Por otro lado, tendrá que ser un profesional altamente capacitado que comprenda con la mayor exactitud la teoría para llevarla a cabo, sin mencionar que deberá de convertirse en un líder, ya que el guiara y manejara diversas situaciones que pueden ser determinantes para la subsistencia de un grupo. En este sentido, tendrá la tarea de lidiar no solo con los aspectos positivos de un conjunto, sino también con los conflictos que surjan dentro del mismo, lo cual para nada es fácil, porque se tendrá que poner a prueba su temple y su conocimiento en técnicas de resolución de problemas, y lograr de este el mejor resultado para ambas partes.
Los conflictos están predestinados a ocurrir en cualquier grupo, en cualquier etapa de este, y obviamente en cualquier integrante, entiendo esto, a que cada persona cuenta con un criterio diferente, una ideología  fija y una concepción de la realidad única, razones que en algún momento provocaran  diferencias en opiniones, y esto, puede ocurrir como ya se mencionó antes sin síntoma previo alguno, y por tanto es necesario estar al pendiente de cualquier fricción que ocurra para poder manejarla en ese instante y no permitir que se convierta en una situación que ponga en riesgo el actuar y objetivo de un grupo. Por esta razón, el interventor tiene que ser muy competente en su qué hacer como asesor grupal, llevando a cabo una observación continua sobre las acciones realizadas, problemas encontrados, metas alcanzadas, etc. Todo esto, con el fin de integrar cada vez un poco más a  los miembros pertenecientes a cualquier colectivo, porque mientras más unido sea este, los objetivos no solo se proyectaran en la productividad conjunta del equipo, sino que de manera automática, impactaran de manera individual a cada persona, esto claro en mayor o menor medida  dependiendo de qué tan unido está el éxito personal en relación con el éxito grupal.

Conclusión

El trabajo con grupos es un proceso único dentro del aprendizaje formal e informal, ya que se mantienen lineamientos específicos tanto para los miembros pertenecientes, como para el asesor que les guía, por tanto, es de suma importancia el aprender a laborar en equipo, apoyarse mutuamente, mantener objetivos individuales y colectivos, y sobre todo mantener un nivel de integración optimo que beneficie al alcance de las metas establecidas.
SI bien es cierto que la mayor responsabilidad recae en los mismos integrantes, ya que ellos serán quienes construyan su propio aprendizaje a través de la labor colaborativa, también, es muy relevante la intervención que realice un profesional dentro un grupo cualquiera, ya que se ha demostrado que este puede convertirse en un agente de cambio que potencialice las cualidades individuales y colectivas de los individuos, como también, el manejo de ciertas las situaciones o comportamientos conflictivos y negativos que se presenten. Por consecuencia, la labor de un interventor es muy ardua pero gratificante, porque tendrá que ser alguien altamente capacitado, armado con la teoría y cobijado en la práctica a través de la experiencia.
Para concluir, se puede exponer que el éxito de un grupo, puede ser mayor o menor en relación a buena o mala intervención que un profesional lleve a cabo, si en el primer caso, se logran de manera óptima los objetivos, estaríamos hablando de un trabajo bien hecho y de calidad, claro está, que se deberá seguir trabajando para la mejora continua, y en el segundo caso, obviamente será necesario, evaluar las acciones realizadas y replantear las opciones para futuras intervenciones.









               

No hay comentarios:

Publicar un comentario